Media Maraton Gasteiz (6º)

Después de varios años, y con una preparación específica, puedo decir que acabé contento con esta Media Maraton, que a la vez era Campeonato de Euskadi una vez más. 

El año pasado llegué corto de forma, tras una lesión que costó recuperar no alcancé un ritmo bueno para afrontar tantos km. Este año llegaba escéptico, con el respeto que le he tenido siempre, y con la mala experiencia que he sufrido las últimas veces. 

El año pasado acabé la prueba en 1:11:12, que no está mal a decir verdad, ya que era mi mejor marca hasta la fecha en este circuito. Pero lejos de mi mejor versión, la de 2017 (1:09:41 en Barcelona) o la de 2016 (1:09:55 en Santa Pola).

Este año venía con lo deberes hechos y con muchas ganas, lo cual es muy importante. Además, la participación, sin ser top, ya que faltan grandes figuras a nivel estatal, era buena. Contábamos con casi todos los mejores atletas de Euskadi en pruebas de "gran" fondo. Atletas conocidos, con los que formar buenos grupos.

Y así fue. Tras una salida un tanto rápida y suicida para mí, no dudé en hacer camino junto a Koldo Ayesta, atleta referente, que para mí ha sido la revelación del año pasado. Veníamos de un nivel parecido ya que en la Santurce a Bilbao entramos también a la par. 

En los primeros km nos quedamos Alberto Diaz (que hizo un carrerón), Koldo y yo. Pasando el km 3 en 9:50 y el 5 en 16:37 aproximadamente. 

Lo cierto es que me costó coger el ritmo, y hasta el km 10 fui un poco raro de sensaciones. Pero a partir de ahí, y a pesar de que la fatiga iba en aumento, vi que mi cuerpo respondía bien y Koldo y yo nos quedamos solos, relevando todo lo que podíamos para luchar contra el viento.

Al paso por el km 17 vi que era posible hacer sub 70, y me vine arriba. Pero aunque me acordaba, me costó digerir el repecho del km 18. Y ahí creo que perdimos todas las opciones. Además el final pica un poco hacia arriba, en piso no muy bueno para correr y con ligero viento de cara. Apreté a tope, descolgando algo a Koldo, en busca de mi tercera mejor marca en la distancia.

Lo logré, pero no conseguí bajar de los 70 minutos. Finalmente entré en 6ª posición (4º vasco) con un tiempo de 1:10:08. Feliz por estar otra vez tan cerca. 

Santurtzi - Bilbao (12º)

En una fecha en la que muchos eligen la Maratón de Donosti se disputa desde hace muchos años la Santurce a Bilbao, mi favorita del calendario. Y es que como muchos sabéis vivo en Santurtzi pero llego a la que fue mi casa durante 32 años, por lo que la hace muy especial.

Y este año, a mis 37, he llegado quizá en uno de los mejores momentos de forma, no lo voy a negar. Llevo un año bueno en el que parece que las lesiones me han dado una tregua y puedo exprimirme un poquito más.

Aún así tampoco estaba la cosa para muchas exhibiciones. Tras una salida rara de narices (antes de tiempo), me coloqué a rebufo de un gran grupo con la intención de aguantar el primer km y medio que es todo para arriba. Para mi sorpresa aguanté bastante bien, ya que el ritmo no fue tan alto como el de otros años. 

Tanto fue así que llegué con la cabeza hasta pasado Sestao. Aquí me puse algo nervioso, ya que me quedaba solo, en tierra de nadie. Por suerte para mí, vi que Koldo Ayesta también se descolgaba, así que hice un pequeño esfuerzo para cogerle, sin mucha intención, ya que es un atleta que anda más que yo, por lo que no tenía mucha fe en poder aguantar mucho.

Poco más adelante, sobre el km 6 cogimos a David Rua. Los tres, o más bien ellos dos, porque yo bastante tenía con aguantar, fuimos juntos hasta casi Zorroza, donde desde atrás nos alcanzó Pablo Maldonado. En ese momento me la jugué a ir con él, dejando atrás a mis dos compañeros de viaje. Pero el flato, que ya amenazaba desde Lasesarre, empezó a aparecer con fuerza y cuando dimos caza a Brahim Elasri no me quedó otro remedio que bajar el ritmo, o no llegaba a meta.

Estos casi 3 km finales se me hicieron un poco bola, pero pude mantener mi puesto, el 12º. Pero más allá de que haya sido mi mejor puesto en esta carrera, fueron 12 segundos mejor que el año pasado, cuando tuvimos un vendaval a favor. Y si sumamos esto a que he llegado con gente que no imaginaba a estas alturas, pues es para estar contento. No sé si podré repetirlo, pero me voy con un buen sabor de boca.

A modo de resumen, mi participación en esta carrera, en la que no he fallado desde hace 8 años, ha sido la siguiente:

2014: 18º (51:40)

2015: 21º (51:10)

2016: 13º (51:03)

2017: 22º (53:12)

2018: 20º (50:37) *(nuevo circuito)

2019: 21º (51:36)

2021: 18º (49:50)

2022: 12º (49:38)

Hiri Krosa Aste Nagusia (3º)

Estos últimos días he estado escurriendo las vacaciones, lo que me ha hecho ausentarme (más de lo que ya es normal) de este pequeño espacio que mantengo, entre otras cosas, para mantener un recuerdo dentro de este pequeño apartado de mi vida que es el atletismo.

Y creo que en él hay cabida para esta carrera, ya que es en una fecha muy especial como son las fiestas de Bilbao, y donde he fallado pocas veces. Además, suele ser la antesala de la temporada, donde faltamos pocos de los que durante la temporada nos veremos las caras.

Además, hace que no corremos desde 2019 debido a la pandemia, por lo que volver a correr es todavía algo más especial. Entonces logré el 5º puesto con un tiempo de 19:59. En 2018 hice 9º pero con un mejor registro: 19:39.

Este año, con algo menos de nivel, he conseguido la 3ª posición por detrás de un intratable Diego Cuadrado y Martin Amilibia, con el que compartí carrera desde el km 2 hasta poco antes de cruzar la meta. El tiempo fue mejor que el de los años anteriores, 19:15.

Ya se puede decir que la vuelta al cole coincide con la vuelta de la temporada (aunque como tal no acaba hasta el 31 de diciembre).

Clasificaciones

Resumen temporada pista 2022

Mi temporada este año en la pista ha sido inusualmente corta. Tan solo he participado en 3 pruebas, y las 3 han sido campeonatos. Debido a mi temporada de duatlones, inusualmente larga también, y a que el calendario de pista ha estado muy concentrado (3 campeonatos en 3 semanas), no he podido dar mucho más.

Desde enero que competí en el Campeonato Master en pista cubierta pasaron 4 meses para que volviera a pisar el tartán. Fue en el Campenato de Euskadi de Clubes en Donosti el 21 de mayo, donde corrí los 3000 m en 9:06 en un disputado sprint por el tercer puesto que consiguió llevarse Mikel Aguirrebeitia. Tuve muy buenas sensaciones que se plasmaron a la semana siguiente.

Y es que sin apenas respirar, tuve que volver a defender al club en el Campeonato de Clubes de Bizkaia. En este caso también era Campeonato Individual. Tuve suerte y pude formar un bonito grupo con Aitor Sandino y Wogen Hoyos para buscar una marca bonita. Nos entendimos muy bien y en el último km nos quedamos solos Wogen y yo. Pude ganar la carrera 5 años después de hacerlo por primera vez y con una marca muy parecida Entonces hice 8:55 y aquí rebajé hasta los 8:53,96. Una marca que me hace especial ilusión, sin duda creo que es una prueba que se ajusta más a mi forma de correr.

Y una semana después fue el Campeonato de Euskadi Individual. Tuve dudas pero debido a mi estado de forma quise ir y aprovechar el punto. 

No fue fácil, y es que fue un primer km un tanto lioso, mucha gente queriendo buscar hueco, muchos cambios de ritmo... Y tras ese caótico momento pasamos el primer km en 3:12. Muy lento para querer buscar algo interesante. Finalmente pude pasar y relevarme con Unai Arroyo y Wogen para buscar un ritmo más alto. El km 2 lo hicimos en 3 pelados, ya que pasé en 6:13. En el km 3 Unai ya se escapaba y Wogen, Mikel Aguirrebeitia y yo marchábamos unos segundos por detrás, consiguiendo pasar el 3000 en 9:16. 

Mis sensaciones no fueron las de otras veces y tuve que exprimirme en los últimos metros en un sprint muy apretado. Finalmente acabé 2º, al igual que hace ya 7 años y con un crono muy parecido 15:25,03 por los 15:21 de 2015. 

Ahora toca desconectar de una temporada algo atípica y un tanto larga, en la que me ha costado entrar después de tantas lesiones que espero por fin ir dejando atrás.

Duatlon Basauri (4º)

Antes de contar mi odisea particular por el duatlon de Zuia, comentaré brevemente por mi paso en este duatlon en el que debuté allá por el 2013. Es un duatlon que me gusta, no lo voy a negar, y este año volvía con muchas ganas, y eso que en noviembre debido a la pandemia pudimos tomar parte. Así que no había pasado tanto tiempo entre uno y otro.

Así las cosas y teniendo en cuenta de que el mister Javi iba a sacarnos los ojos en bici, decidí correr con el grupo con la intención de guardar el máximo posible para coger la bici con esperanzas de mantenerme en él.

Llegué en 2ª posición en el grupo de cabeza y pude hacer una transición sin demasiados problemas. Al poco Javi nos pasó sin dar ni siquiera opción a seguirle. Poco después mi suerte, la mala, volvió a golpearme en forma de salida de cadena antes de comenzar el puerto. Tuve que bajarme de la bici y solventar el problema mientras el grupo trasero me pasaba.

Por suerte el grupo bajó el ritmo y ambos grupos se juntaron mientras yo intentaba volver a su estela. Conseguí coger el grupo pero llevaba un buen calentón para no poder alcanzar a los que a la postre fueran 2º y 3º de la carrera.

Pude juntarme en el grupo de Koldo Etxebarria y Jon Trigueros y llegar con ellos a la T3, donde hice una transición fugaz para poder salir a tope en este último sector.

Yo pensaba que iba lento, pero al ver los tiempos parciales hice el tercer tiempo, aunque no fue suficiente para alcanzar a Sanvi, quien cerró el podio. 

Por tanto, sumo mi segundo cuarto puesto de la temporada, pero no me quejaré, ya he sido dos veces 4º en un campeonato de Euskadi de Duatlon y no tengo para nada la sensación de ser el primer perdedor. Lo que sí me dio rabia fue ese problema mecánico que me hizo perder alguna bala de más. Culpa mía por no tener la bici a punto.

Aquí la foto del podio:

Y aquí la del 4º

Y con esta última carrera actualizo así mi paso por Basauri en los últimos años:

2013: 15º

2014: 18º

2015: 7º

2016: 22º

2017: 6º

2021: 5º

2022: 4º

Feliz, que no quepa la menor duda.

San Silvestre Rekalde (1º)

 Tras la cancelación a última hora gracias al ayuntamiento, la San Silvestre de Rekalde decidió aplazar la prueba que se debía celebrar el 31 de diciembre. Así, el Club Korrikazaleak, al que le debemos todo el esfuerzo, decidió posponerla al 20 de marzo. Una fecha complicada, que coincidiría con la celebración de Laredo el día antes o la carrera de San José de Villasana el mismo día.

En mi caso, el día anterior había corrido en Oñati, por lo que mi rendimiento iba a ser una incógnita. Según el ánimo y las fuerzas iba a acompañar a Saioa o a disputar la carrera, la cual he conseguido ganar las últimas 4 veces.

Y me levanté casi bien, y fui animándome al ver que el día amanecía muy primaveral. En la salida los habituales: Juan Carrascal, Igor García, Kristian Quintans... Pero faltaban algunos clásicos que el 31 de diciembre no hubieran fallado.

El recorrido esta vez partía desde Rekalde, teniendo la salida y la meta en el mismo lugar. Un acierto el nuevo recorrido, ya que además se pasa por la Gran Vía de Bilbao, pasando por calles míticas que un 31 de diciembre habrían estado abarrotadas. Espero que el año que viene lo repitan.

La carrera se decidió bastante rápido. Kristian se encargó de poner un ritmo muy duro, quizá sabedor de que tanto Juan como yo habíamos corrido el día antes. Primer km en 2:57, con ligera bajada, pero que ya nos dejaron las patitas temblando. Al paso por el km 2 mi GPS me marcó un ritmo medio de 3:03, lo que había producido un corte significante con el grupo trasero.

En el km 3 noté que me encontraba bien y decidí apretar más para ver qué tal iban mis compañeros de viaje. Vi que Kristian hacía la goma, pero Juan seguía bien pegado. Así aguntaríamos un km más, y en la subida a Amezola gasté otra bala para irme en solitario.

Crucé la meta en 1ª posición por 5ª vez (una compartida con Kristian hace 2 años). Pero lo mejor fue ver a Saioa por fin compartiendo un podio conmigo (fue 2ª tras Isabel Sixto). 

Duatlon Oñati (8º)

Coincidiendo con los 10 km de Laredo, se disputó el Duatlon de Oñati. Muchos me preguntaron por qué no estaba apuntado a la prueba cántabra. Dos fueron las razones:

La primera es que ya me apunté a Castellón por probar una carrera nueva que además coincidía con unos días libres gracias a los carnavales, y que aprovechamos muy bien. Además poco después, debido a la caída, me apunté a Etxebarri, prueba homologada, donde conseguí rebajar 5 años después la barrera de los 32 minutos. 

La segunda es que Oñati es Oñati. Además, tras la edición pandémica en formato contrarreloj, la carrera nos debía una.

Y no defraudó a pesar de una baja, que no mala, participación.

Allí llegamos Javi, a la postre 2º, Kexu y yo. Comimos allí, reconocimos el circuito y nos unimos a la fiesta.

Primer sector fatal de sensaciones, donde tuve que dejar marchar el tren del primer grupo. Aunque llegué a la T2 en el mismo puesto que después cruzaría la meta.

El sector ciclista no fue mejor. Tras intentar agarrarme a la rueda de Rubén Ruzafa y Javi, al paso por el primer repecho ya  pedí el tiempo muerto. Muerto porque así me quedé, aferrándome a la única esperanza de una persecución sin futuro que me daría el bueno de Iban Azarola.

Juntos intentamos pillar al grupito de cabeza, y aunque no nos sacaban más distancia por detrás ns alcanzó un numeroso grupo. Y entonces sí, entonces me entró algo el aire.

La segunda vuelta fui encontrándome mejor, aunque casi tengo un susto en la subida, ya que nos dejó literalmente "clavados". No besé el suelo por el canto de un céntimo y decidí que era momento de ir hacia delante.

La última medio subida la hice en cabeza para evitar problemas en la bajada y entrar con seguridad a la T3.

Aunque entré el último, en pie, eso sí. Y aquí decidí arrancar el motor y cuando conseguí adelantar al primero del grupo, y viendo que el siguiente estaba a años luz decidí no quemar más balas y conservar un 8º puesto que supone mi mejor posición en este Duatlon. Eso sí, con bajas de entidad considerables.

Resumen participaciones en Oñati: 

Año 2013, puesto 48º

Año 2016, puesto 9º

Año 2017, DNF

Año 2019, puesto 11º

Año 2021, puesto 14º

Año 2022, puesto 8º 

Herri Krosa Etxebarri (1º)

 A la tercera va la vencida, o eso dice el dicho...

Vine a Etxebarri de rebote. Tras el varapalo de Castellón, a donde llegué en perfectas condiciones y una caída me privó de lo que creo que hubiera sido una gran marca, me vi en la necesidad de buscar otra arrera de 10 km donde pudiera reflejar lo que mis piernas decían. Al no estar apuntado a Laredo, ya que coincide con una de mis pruebas favoritas (Duatlon de Oñati), la que más se ajustaba por fecha era esta.

Y no es que el circuito sea expresamente rápido, en mi opinión, pero tampoco es lento. Además hay que dar 3 vueltas y eso hace que psicológicamente pueda pasar factura. No llegué en la misma condición que a Castellón, ya que llegué mas cansado, pero igualmente tenía en la cabeza ese sub32 que llevaba rondando todo el año.

Y tuve suerte, ya que estas cosas no se consiguen a menos que encuentres a alguien que sea de tu nivel o mejor. Y allí se encontraban Diego Pascual y Gustavo Sánchez, a la postre 2º y 3º que hicieron todo menos difícil.

Salimos a muerte, guiados por Gus que nos marcó un paso por el primer km de 3:02. Una locura. Menos mal que el segundo km con algo de viento en contra y tras un ligero repecho equilibró un poco el ritmo en un paso de 3:17. Poca broma. Tras esto decidí ponerme delante para recuperar algo el ritmo y estabilizarlo algo más. 3:12 marcaba el siguiente paso recuperando en el siguiente varios segundos, donde ya Diego empezó a marcar un ritmo crucero que iba a descolgar al resto del grupo. 3:07 para este km y 3:10 en el km 5, donde ya manejábamos un parcial de 15:50.

Este tiempo estimaba una buena marca, pero aún quedaba la mitad de carrera. En Ulía pasamos en el mismo tiempo y al final se nos fue bastante. Quise ayudar a Diego, pero la verdad es que los primeros km me atufaron bastante y no tenía el día súper que había tenido en otras carreras. Hasta el km 7 fuimos bastante constantes, Diego tirando y yo hecho polvo intentando aguantar. No fue hasta el paso por el km 8 donde vi que era posible bajar de los 32 minutos y en el km 9 me puse delante para darlo todo.

Siendo sinceros me precipité bastante, ya que se me hicieron muy largos los últimos metros. Cada vez intentaba apretar un poco más y cuando vi que había sacado un metro a Diego me lancé con todo hacia la meta. 

5 años después volvía a bajar de 32. Aunque ya lo hice en Ulia, pero los jueces decidieron otorgarme dos segundos más para darme un tiempo oficial de 32:00. Qué mala leche. No iba a ser menos en esta carrera, no sé por qué el chip de estas carreras marcan siempre dos segundos más... Así, de los 31:45 del tiempo oficioso me quedo con un 31:47 oficial, segunda mejor marca de mi vida. Poca cosa para algunos, pero que después de varios años sufriendo muchas lesiones me hace mucha ilusión.

Como bien dice mi pareja de vida: "No es fácil trabajar, ser padre y competir bajando de 32 minutos en 10 km. Hoy carrera de dos grandes"

Especial mención a Diego, que además de hacer una grandísima carrera consiguió también su mejor marca. Para mí uno de los atletas revelación de Bizkaia de los últimos años.

 

Fotos: Korrikazaleak

Duatlon Eibar (4º)

 Tercer duatlon de la temporada, esta vez en Eibar. De las pocas veces que nadie me acompaña a una carrera, y es que a veces la logística se hace complicada... Pero allí me encontraría con mis compañeros del club S.C Bilbaina, y tras recoger el dorsal fui con Jon a tomar el café de rigor precarrera. Aquí es donde aprovecho a tomar los apuntes de la carrera. Antes lo solía hacer pronto, pero en los últimos años vengo bastante despistado y prefiero hacerlo casi in situ.

El día amaneció poco halagüeño, cuando salí de Santurtzi caía la del pulpo, y a mí eso no me gusta nada, ya me he retirado un par de veces a causa del frío y esta vez lo tenía claro, si llovía y a 6º como estábamos, iba a tener que gestionar la carrera abrigado y en otro plan, entre los cuales contaba con la retirada en el segundo sector. 

Pero el tiempo respetó, y tras un calentamiento por primera vez algo decente nos acercamos a la salida, algo ratonera por cierto, donde como siempre se salió a mil por hora. Me costó un poco coger el ritmo, pero algo menos que en Erandio, donde no me sentí bien en ningún momento, y tras subir y bajar y volver a subir en un circuito bastante duro y con mucho giro, pude estabilizarme en un grupito donde marchaban, entre otros, mi excompi Koldo, Alberto, Hoss... El grupo "bueno" como digo yo, por detrás de la ciencia ficción de Joanes y Urko.

Y más o menos el grupo salimos de la transición casi juntos. Aquí Eguiguren, Azarola y Labaka parecían los más fuertes, la verdad. Pero los continuos ataques no nos hacían ningún favor, y al paso por el km 10, después de subir el repecho hacia el polígono donde nos vigilamos mucho, sucedió la caída. Primero fue Azarola, que no pudo controlar la bici en la rotonda puesta a mala leche en mitad de la bajada. Tras él se fue Koldo al suelo. Los demás libramos, no sé muy bien como, y nos quedamos 5 personas jugándonos el tercer puesto.

En el siguiente repecho, donde Javi E y Xabi L tiraban como animales Alberto se descolgó, y Hoss y yo pudimos acercarnos a la rueda no sin esfuerzo. Y menos mal, porque por detrás ya nos pisaban los talones.

Conseguimos llegar los 4 a la transición, escapándose primero Javi y yo después. Sin mirar hacia detrás y tirando de casta conseguimos hacer un pequeño hueco que nos iba a valer para jugarnos la 3ª plaza. A este chaval no le conozco bien, pero el tío corre mucho. Yo además había tenido un sustito en los gemelos, por lo que no podía apretar tanto como me gustaría. Así que tuve que esperar al final esperando que el amigo se cansara.

Pero otra vez ingenuo de mí, la juventud tiene un plus más, y no pude hacer absolutamente nada en los últimos metros. Aunque por otro lado no os imagináis lo bien que me sienta lo que se conoce como la "medalla de chocolate". 

Un buen rato ya pasé, y pude disfrutar del tercer tiempo por fin con la gente del club. Además de poder charlar con Txomin, que me contó las jugadas de su hermano Pello en Soria. Buenas risas, buena gente.

La siguiente parada será en Etxebarri, ya que me quedé con mal sabor de boca en los 1o km de Castellón, del cual no hice crónica y que resumo de la siguiente manera: salida masificada, gente que se cree Kipchoge y te tira al suelo. Carrera arruinada y magulladuras que gracias a Dio no pasaron mucha factura. Eso sí, no se parecerá en nada a esta carrera, pero trataremos de disfrutarla a tope.

Duatlon de Erandio (13°)

Segundo duatlon de la temporada y el primero en Euskadi, concretamente en Erandio. Era la primera vez que lo hacía y viendo el calendario iba a ser el único hasta marzo.

Desde luego esto no fue como Reinosa, aquí el nivel lo marcaba sobre todo un equipo: Alusigma, que aprovechando una concentración de esas que solo hacen los profesionales vinieron a competir a este municipio.

Y no fueron pocos, los autodenominados campeones de todo en España, que lo son, presentaron un elenco de participantes que se nos acaban los dedos de las manos. Todos buenos, claro.

Así que la carrera desde fuera debió ser muy aburrida, solo salvada quizá por Iker Ortiz, cuya estrategia de salida quizá no fuera la mejor, aunque dio algo de espectáculo y quizá algún susto. Yo en mi caso salí con todo y ya les veía lejos en el primer km. 

Tuve suerte en este primer sector para encontrarme con Alberto Diaz, un clásico de los duatlones, con el que compartí el 90% de la carrera. Salvamos los muebles en los primeros compases de la prueba, donde ya hubo caídas y llegamos juntos a la transición.

Aquí nos empeñamos unos pocos en intentar enganchar con los de delante, pero la falta de entendimiento hizo que cedieramos cada vez más tiempo y que nos alcanzarán por detrás.

A partir de aquí decidí conservar, ya que salvando las distancias, últimamente me siento rápido corriendo.

Tras dormirme un poco entré el último del grupo a la T2, tanto que incluso llegué a entrar andando por el tapón que se formó. No me puse nervioso, total la carrera estaba vendida, pero sí que conseguí salir muy rápido.

Conseguí enlazar con Alberto, Murua y Trigueros antes del rampón infernal que nos propuso la organización, y ahí es donde decidí cambiar el ritmo. Me siguió Murua, un chaval que desconocía y que me hizo sufrir hasta entrar en meta. No me dio opción a un sprint que, de haber sucedido, habría perdido seguro.

Finalmente entré en la posición 13, siendo Alusigma quienes coparían los puestos del 1 al 4, del 6 al 9 y también el puesto 12°. Entre medias se colaron Iker, el incombustible Hoss y Azarola.

Por equipos creo que pudimos hacer 3°, y es que nosotros también pudimos llevar a mucha gente y todos cumplimos, aunque hubo que lamentar la retirada de Iñigo que esperemos no sea nada grave.

Duatlon Blanco Reinosa (2º)

 El pasado 30 de enero volví a hacer un duatlon en Reinosa. Pero esta vez la carrera era diferente, ya que se hizo junto a la prueba del llamado Triatlon Blanco. En nuestro caso, la carrera consistía en 5 km a pie por el pueblo y un segmento ciclista hasta la estación de esquí de Alto Campoo.

Aprovechamos el viaje para hacer un poco de turismo y pasar un par de días los 3 en familia. El día previo nos acercamos a coger el dorsal y de paso preguntar un poco sobre cómo iba a ser la carrera. El tiempo apuntaba más bien a bueno, por lo que frío no íbamos a pasar más que a primeras horas. Me hacía especial ilusión volver a correr en Reinosa, donde he podido conseguir un 4º y un 2º puesto en ediciones anteriores, en su formato de duatlon habitual. Este año además, volvía con el club que empecé, la S.C. Bilbaina.

Así, se dio el pistoletazo y como suele ser habitual, al no conocer a muchos de los participantes, fue ver cómo se hacía el grupo cabecero. No iba mal en los primeros metros, así que decidí marchar con Ibergallartu, al que no conocía. Menos mal que estaba apuntado a la prueba reina, porque el tío me llevaba demasiado rápido como para aguantar después el segmento ciclista...

Decidí hacer el resto del segmento a mi ritmo hasta que me alcanzó Manu Vega, del que quise despegarme poco antes de la transición para tener más margen y no liarla como de costumbre. 

Pero para mi sorpresa hice la transición muy rápido y marché en solitario. Demasiados km como para ir solo, así que decidí no ahogarme y ser cauto hasta que me cogieran. Sabía que por detrás venían buenos ciclistas, entre ellos Dani Ibarrola, del que tengo buena cuenta de cómo anda.

Y así fue, porque a principio de puerto y con 11 km aún para llegar a la meta atacó consiguiendo una buena renta. Yo me mantuve en el grupo, bastante más cómodo de lo que estoy acostumbrado, y me sorprendió que nadie me siguiera cuando decidí ir a por Dani.

Yo que esperaba formar un grupo de caza y me vi solo frente al peligro, subiendo un puerto que no conocía y que para nada se ajustaba a mí. Pero iba bien. Y cuando uno va bien tira para adelante.

No fue hasta 4 km antes de coronar cuando atrapé a Dani, pero ya había gastado todas mis balas. Lo que sí sabía es que faltaba un último repecho, y aunque creía que iba algo mejor que él, enseguida se frustraron todas mis opciones. El Valverde de Zuia me dejó sentado en los últimos 600 m para saborear la victoria. 

Yo iba desajustado, con las luces encendidas pero con fuerza para poder llegar tranquilo en 2ª posición, por delante de los duatletas Jose Ramón Fragueiro y Silvestre Conejo. Contento con mi rendimiento sobre las dos ruedas pero con dudas por la carrera a pie. Entendamos como dudas a que no rendí como esperaba, ya que sigo sintiéndome más atleta que ciclista... Dudas que, por otra parte, se despejarían una semana después en Ulia, donde si tengo tiempo, contaré la siguiente batallita.

CLASIFICACIONES

San Silvestre Castro (3°)

Como todos sabemos, debido a la situación sanitaria nos fuimos quedando sin San Silvestres que correr. Como todos los años mi prioridad era correr en Bilbao, ya que es allí donde celebró las fiestas y los Korrikazaleak siempre cuentan conmigo, lo que es de agradecer.

A falta de dos días al pertinente alcalde se le ocurrió suspender la prueba, y seguidamente le fueron copiando sus colegas.

Así pues me quedé sin planes y enseguida empecé a mover hilos hasta que gracias a Saioa conseguí dorsal para Castro.

La única pega es que la carrera era un poco tarde, pero ya que hacía tiempo que no veía a un amigo de allí y además corrían varios más, nos acercamos.

Pero no contaba yo con un detalle importante, y es que salía con el dorsal 180 y según el protocolo Covid, debía salir en el último cajón. Tanto Javi como yo intentamos solucionar ese inconveniente ya que trastocaba todos los planes para disputar una carrera así.

Lo que más nos sorprendió fue el trato de un juez, que muy alterado no utilizó las mejores palabras hacia nosotros y muy nervioso hasta nos "invitó" a abandonar la carrera. Un ambiente magnífico para finalizar el año.

Tras este momento no pudimos hacer otra cosa que salir los últimos e intentar remontar. Y salí con esa idea, aunque la verdad es que fui pasando por diferentes estados emocionales.

El primer km fue agónico y apenas me había acercado al grupo de cabeza. Por lo visto debieron tener la misma idea que yo de salir a muerte hasta que el cuerpo aguantaste.

No fue hasta el km 4 cuando alcancé al segundo grupo, pero tanto Óscar como Xabi iban ya destacados. 

Tuve la sensación de tener el corazón en la boca toda la carrera. Fue una agonía total. Los últimos 500 metros decidí que iba a ser mi último esfuerzo cuando ya vi que era factible quedar 3° a pesar de todo.

Y llegué en esa posición, a 4 segundos del 2° puesto, pero con la sensación de no haber competido, porque no me dejaron.

Con este post quiero zanjar cualquier polémica, no sé por qué de repente soy tan importante para ciertas personas siendo un atleta bastante mediocre, pero se lo debo en primer lugar al  Club de Castro, ya que entré muy enfadado a meta, y es que es difícil gestionar algo así cuando has ido toda la carrera con todo en contra. Desde aquí dar las gracias por poder hacer mi inscripción de última hora.

Y sobre mi ausencia en el podio. Evidentemente no es algo que suela hacer, aunque muchos buscan en los archivos para encontrar alguna de ellas. Como he comentado anteriormente, la carrera fue un tanto tarde, y para alguien con familia existen prioridades, y aunque esperé un buen rato para recibir el premio tuve que tomar la decisión de marcharme para celebrar la última noche del año.