Ayer disputé la primera prueba de la temporada, aprovechando mis vacaciones en Cangas de Morrazo. La verdad es que ha sido una bonita casualidad que se celebren las fiestas de este pueblo justo en estas fechas. Y más casualidad aún que este año haya sido el primero en el que celebran una milla popular.
Y qué os voy a contar, como es lógico en alguien como yo me apunté. Pero justo el día antes de la prueba me ataca una gastroenteritis que me deja fuera de juego todo el día. Al día siguiente no tenía clara mi participación pero me fui animando poco a poco y allí me presenté. No tenía ni idea de qué nivel me iba a encontrar, pero tratándose de territorio gallego seguro que fácil no iba a estar. En la salida poquitos participantes, esperemos que el año que viene se anime más gente. Salida a todo gas y en la primera vuelta (de un total de 3) ya nos quedamos 6 en cabeza. El ritmo no es extremadamente alto pero ya se nota que algunos van controlando. Tanto fue así que en la última vuelta al paso por el primer cono ataca uno y se va de largo, tratándoles de seguir todos los demás. Yo, por mi parte, me quedo rezagado, y es que a esta altura de la temporada, sin ningún entrenamiento específico, es difícil seguir la rueda a estos atletas.
Así que termino en sexta posición pero con una mejor marca en la distancia de 4:57. Así que muy contento con este pronto debut.
