El pasado domingo finalicé la mini-temporada que me propuse después de mi lesión. Fue en los 10 km de Castro, donde no conseguí mi objetivo de bajar de los 33 minutos ya que, en parte, el calor influyó mucho en todos los participantes.
No quise escatimar y de salida me fui con la cabeza, un grupo de 4 atletas, donde a la postre se disputarían la victoria entre Alfonso Mendoza y Naoufal Erraoui, siendo ese segundo quien se la llevaría.
Pasamos el km 2 en 6:15 y ya enseguida comprendí que no iba a ser mi ritmo, por lo que decidí levantar el pie y esperar al siguiente grupo que no andaba muy lejos. Pude haber seguido un poco más con el grupo delantero, pero viendo el desfallecimiento de alguno de ellos creo que fue una decisión acertada.
Con ellos pasé el km 5, donde decidí coger un parcial (16:46), ya vi que se me escapaban por mucho mis aspiraciones. El grupo de cabeza cada vez estaba más lejos, pero yo estaba recuperando fuerzas.
Así, en el km 6, y viendo como el ritmo iba muriéndose, decidí apretar y escaparme junto a David Mosquera del grupo. Veíamos a uno de los atletas del ADAS Proinor cada vez más cerca, por lo que animé a mi compañero de viaje que apretáramos para ver si podríamos cogerle. Poco después, antes del km 8 vimos como se paraba, seguramente debido al ritmo asfixiante con el que comenzó la prueba y el calor, que cada vez hacía más mella en todos nosotros...
Los últimos dos km fueron bastante rápidos, animé a David a que me siguiera, él me dijo que no iba a disputarme el tercer puesto ya que iba con el gancho. Así que apreté, porque también por detrás, aunque aún lejos, nos iban a achuchar.
Finalmente crucé la meta en 3ª posición, con un segundo parcial de 5 km en 16:47, casi clavado al primero. El primer clasificado cruzó la línea en 33:01, lo que revalida la pérdida de ritmo progresiva durante toda la carrera.
