Este domingo tocaba un test muy importante para mí. Así que me acerqué a Basauri a correr la Herri Krosa, una carrera que no disputaba desde el año 2012 donde logré el 8º puesto.
Llegaba a la carrera muy fresco y así me notaba calentando. Y es que este año mientras Saioa preparaba la maratón he empezado un poco antes y llegaba bien, con muchos km acumulados. La carrera en sí es bastante complicada, ya que hay que superar alguna que otra cuesta, pero nada que ver con otras que se corren en esta localidad.
Allí nos juntamos varios de la SCB, como Raúl y Ernesto, además de Miguel, que más tarde ayudaría en parte a ganar a Saioa en la categoría de féminas. Mientras OMH Natural preparaba la camilla para los masajes post-carrera.
El día no era el mejor, bastante frío y lluvia que nos acompañó sobre todo al final de la prueba. La salida fue puntual a las 11 y ya desde salida me coloqué en las primeras posiciones.
Salimos un poco lentos, así que decidí ponerme en cabeza durante un rato a ver como respondía la gente. No conocía a todos, así que me sucedí en los relevos con David Mosquera, esperando las hostilidades. Pero no llegaban. Tras el primer km a 3:17, le sucedieron dos a 3:30, por lo que fue el momento en el que decidí tirar hacia delante.
Me fui solo y cuando miré hacia atrás vi a dos atletas que me seguían. La carrera ya estaba rota.
Pasé por la meta volante y según bajaba hacia el puente un hombre de la organización me mandó por donde no era. Ahí terminaría mi carrera. En un momento caótico donde me encontré con los corredores de la prueba corta en dirección contraria me pudieron los nervios. No sabía hacia donde tenía que ir, sabía que algo fallaba. Entonces otra chica con el banderín se dio cuenta y me dijo que diera la vuelta. Así le entendí, pero en realidad me mostró un pequeño atajo que me hubiera llevado bien hacia la dirección real de la carrera.
En ese momento llevaría unos 20 segundos con mis dos perseguidores. En este despiste (no mío, claro está) perdí casi minuto y medio.
De pronto bajé de la primera posición hasta la 13ª. Seguí hacia delante, iba a terminar la carrera aunque ya no tuviera ganas. Alcancé al grupo de Eulate, Hernando y compañía. Ellos tampoco se creían lo que había pasado. Logré alcanzar la 6ª plaza y veía a la cabeza no muy lejos. Pero no me iba a dar tiempo. Superé a Mosquera antes de llegar a la pista del polideportivo y ya no podía más. Imposible. Logré cruzar la meta en 5ª posición a 32 segundos.
Lo importante es que me encontré muy bien y completé la carrera en 38:59, 22 segundos mejor que hace 4 años y recorriendo más metros, aunque me dio mucha rabia perder esa "txapela" que ando buscando.
Desde aquí felicitar a Jon Garate, ganador de la prueba, Iñaki Martinez y Sergio Mijancos. Al menos sus ánimos calmaron un poco mi malestar. También quiero decir que la organización no tuvo su mejor actuación, pero no por ello quiere decir que sea una mala carrera. Desde mi punto de vista se cometieron dos errores:
1. Realizar dos pruebas conjuntas.
2. Poner a gente en los cruces que no esté atenta a cada una de ellas.
Fue un error humano, debido a una sola persona, por la que yo recorrí casi 300 metros de más. Todos, incluido el organizador se disculparon y yo desde aquí lo agradezco. El año que viene no sé si volveré, porque he renunciado a otra carrera por venir a esta, y porque ya es la segunda vez que me pasa una situación parecida. Eso sí, el recorrido ya me lo conozco por si acaso.
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