El próximo domingo correré la primera Media de la temporada. Será como siempre en Bilbao, sobre un circuito casi completamente llano y en el que el año pasado paré el crono en 1h21:44. Este año, si el cuerpo me lo permite, intentaré rebajar la marca hasta 1h18:00. No voy a ser más ambicioso por el momento.
Además cuento con una nueva lesión, esta vez no muscular ni ósea, pero igual de importante. Siempre nos han advertido sobre el uso de las zapatillas y nosotros siempre hemos intentado hacer más o menos caso. Yo no soy de esos, para que os voy a engañar. Mis zapas hace tiempo que cumplieron los 1500 km, y por supuesto, lo he terminado pagando. En este caso, el castigo viene en forma de ampolla, ya que las plantillas están absolutamente cuarteadas. No soy muy dado a enseñar las partes de mi cuerpo, pero ahí va:
Para intuir el alcance de la lesión
Esto me sucedió la semana pasada, y yo he seguido entrenando con otras zapatillas, pero el mal ya estaba hecho y ayer hice crack (La tirada fue larga y exigente, mi pie no lo soportó). Así que solo me queda esperar a que se me cure la avería. De momento, si el tiempo lo permite, centraré los entrenos en la bici.
Pero hablando de la Media de Bilbao, he conseguido contar con la ayuda de mi "cuñado", que hará de liebre en los últimos km, a partir de ese momento en el que siempre me suelo encontrar solo y es más fácil hundirse. Veremos como va, si al final puedo correrla.
Como siempre, lo contaré.