Después de dos semanas en el dique seco por culpa de una lesión, mis dudas para participar en esta carrera estaban presentes. Una pronta recuperación y un parón casi por completo una semana antes me hizo decidir participar en una de mis pruebas preferidas del calendario. Y es que la Santurce a Bilbao siempre se me ha dado bien (18º en 2014 y 21º en 2015, donde fui 5º y 4º vasco respectivamente).
Esta vez llegué con algo menos de esa presión que se mete uno a sí mismo. Suponía que la forma iba a estar ahí, pero no haber trabajado ritmos muy fuertes durante un tiempo me dejaba inseguro, aunque con la certeza de que iba a hacer lo que pudiera.
En la salida como siempre un gran nivel de atletas africanos y además la presencia de Iván Fernández, nuestro mejor atleta y que a la postre quedaría 4º. Entre los demás: Oier Ariznabarreta, David García, Aitor Mimenza, David Rua, De la Granja, Iban Rodriguez, Mijancos, Quintans, Alba... Un elenco de atletas importante.
Se da la salida y como siempre se sale rapidísimo (3:09 en mi gps para le primer km) y veo que se va formando un grupito por detrás de los africanos en el que van Oier y David. Me cuesta cogerles y me quedo solo junto a Othman Bougader en la persecución. No es hasta el km 2 y pico cuando consigo alcanzar al grupo. Ahí marcha también Aitor, Aimad Bouziane e Ismail Razga.
No tarda mucho en quedarse este último y me quedo en este quinteto aguantando los tirones. Al paso por Lutxana David cambia un poco el ritmo y Aimad se descuelga unos pocos metros. Esprinto a tope para poder recuperar el grupo y pensando que este tiron pronto tendría que parar. Pero David aguanta bastante hasta que deja hacer otra vez y Aimad vuelve a meterse en el grupo.
Este es terreno conocido, campo de mil batallas contra mí mismo en cada entrenamiento. He llegado a casa y me veo aún bien. En la cuesta del antiguo cargadero David aprieta y Oier se agarra a él. Yo lo intento y por poco llego arriba con ellos, pero no tengo ni las fuerzas ni su nivel para conseguirlo, por lo que nos quedamos Aitor, Aimad y yo en su persecución.
Ya en Olabeaga vuelvo a ver a Oskar que me vuelve a animar, como lo venía haciendo durante todo el recorrido en moto. Otra vez me emociono. Pero ya las fuerzas están muy justas y queda la última rampa que da a Mazarredo, donde seguro que todos tienen una última bala preparada.
En cuanto empezamos a subir escucho a Aitor quejarse, esta es la mía, aunque las fuerzas estén justas. Total, al sprint siempre pierdo y como mucho haría el 15º, no tenía nada que perder. Fui con todo y Aimad se agarró a mi rueda. No miré más hacia atrás y así llegué a meta, donde el atleta de Vitoria me respetó el puesto 13º. Mi mejor resultado en esta carrera y repitiendo mi 4º puesto de atletas vascos, por detrás de Ivan Fernández, David García y Oier Ariznabarreta. ¡Total nada! Además conseguí mi mejor marca en esta carrera: 51:03 para los 15,6 km de recorrido.
Desde aquí felicitar a todos estos atletas, verme con ellos es algo que no creía capaz hace un tiempo, además que les respeto muchísimo por ser como son, ¡un placer acompañaros en este viaje!
No podía faltar el Running Free Team, liderado por el gran Bittor, una gozada compartir estos momentos con gente tan grande.