lunes, 26 de enero de 2015

Copa Euskadi Clubes

No estaba en los planes el formar parte del equipo que mi club iba a llevar a la Copa de Clubes, pero una baja de última hora me subía al carro en la prueba de 3000 m.l. Esta iba a ser mi segunda participación en la pista cubierta de Anoeta, y ya que se presentaba la ocasión, por qué no iba a poder atacar mi mejor marca. Todo dependía de cómo fuera la carrera y cómo se encontraran mis piernas.

Como el comienzo de las pruebas se daba a las 16:30, llegamos a Donosti una hora antes y a mí aún me quedaba un buen rato hasta mi prueba (18:15). Aproveché para tomar un café mientras me iba haciendo a la idea de la que me esperaba. En la lista de salida figuraban Aingeru Gutiérrez, ganador el otro día en el Cross de Bizkaia, David Maldonado, una joven promesa que va a dar mucho de qué hablar y Sergio Román, un veterano en esto de las carreras, entre otros. Vamos, que la carrera iba a poder ser muy rápida para mí. Por primera vez en mi vida me planteaba una prueba a un ritmo que podía ser por debajo de 3 min/km.

Después de disfrutar de varias pruebas me fui a calentar con mi compañero Rubén por las inmediaciones. Pillamos buena chupa de agua, pero llegué a la zona de salida bien calentito. Una vez que estás ahí dentro los nervios afloran demasiado deprisa. Tanto que se me olvidaba por momento cómo se ataban las zapatillas.

Ya en la línea de salida Othman Bougader llega tarde y le sacan tarjeta amarilla. Se da el pistoletazo y resulta ser salida falsa, ya que el mismo atleta estaba pisando la raya. No pasa nada, tarjeta verde para todos y esta vez sí, salida válida y a correr, o volar... En un abrir y cerrar de ojos estoy penúltimo, pero me las arreglo para adelantar una posición mientras pasamos las dos primeras vueltas a ritmo de 2:57. Un atleta se queda muy rápido y a Pedro Rojas no se le ve muy fino. Como esto es Copa de Clubes, importa mucho el resultado, así que procuro no soltarme. Primer km y 2:55, esto empieza a ser de locura. Othman empieza a perder ritmo y yo voy justo detrás suyo. Aprovecho para coger aire unas vueltas y me quedo con él. Él va perdiendo ritmo y una vuelta después del ecuador de la prueba decido adelantarle con todo lo que tengo. Cuando le paso veo que va mucho peor de lo que pesaba Así que me concentro a partir de ahí en mi carrera. Paso el km 2 en 6:00, tras un km rodando a 3:05.

En este momento me quedan 5 vueltas a la pista, pero el cálculo no es muy difícil de hacer, tengo que correr a menos de 3 min/km para lograr bajar de 9 minutos. Ya voy bastante tocado y me queda exprimir a tope lo poco que tengo. Por detrás está ganado, voy en 4ª posición y sin opciones de cazar a nadie más. Estoy solo en mi batalla personal contra el crono. Y cruzo la meta, en mi reloj pone 8:59,38, pero queda esperar al reloj oficial que finalmente marca 9:00,50.
 
Me voy con un buen sabor de boca, una nueva marca personal en la distancia (la anterior era 9:09,96 en la misma pista), pero sin la guinda del pastel, que hubiera sido bajar de esa barrera más psicológica que otra cosa, que suponen los 9 minutos. ¡Habrá que esperar!
 
En el apartado colectivo conseguimos la 5ª plaza de un total de 8 equipos, todo gracias a los atletas que se dejaron la piel, algunos en pruebas que desconocían y otros en las que llevaban mucho tiempo sin emplearse.
 
Por lo demás, esto sigue y toca recuperar para otro calentón en el Cross de Azpeitia.

lunes, 19 de enero de 2015

Cto Bizkaia Cross (12º)

El domingo se celebró el Campeonato de Bizkaia de Cross en la localidad de Berriz. El pronóstico, como va siendo habitual en el último día de la semana, era de un tiempo horrible y horroroso, con nevadas en cotas bajas y mucho frío. Pero nada de esto se dio ya que durante la mañana el tiempo fue mejorando e incluso pudimos disfrutar de buenos ratos de sol.
 
En cuanto a la carrera, este año poco tuvo de cross, a excepción del circuito llano con hierba alta y no mucho barro que pudimos disfrutar los corredores en las dos primeras vueltas. Y es que en las cinco vueltas posteriores se mezcló este circuito con una subida más propia del trail running que del cross, con una bajada, en mi opinión, muy peligrosa y con demasiado desnivel, curvas contraperaltadas y mucha hoja suelta. Un recorrido pensado, quizá, para los que la prensa citaba como grandes candidatos al triunfo: Oier Ariznabarreta y David García. Corredores, ambos, con una buena trayectoria en las carreras de montaña. ¿Casualidad?
 
En cualquier caso la victoria se la llevó el Hassan Oubadi y el campeón de Bizkaia, en este caso, correspondió a Aingeru Gutiérrez.


 
En cuanto a mi carrera la planteé con el claro objetivo de hacerlo lo mejor posible para poder llevarnos por equipos el Campeonato. Como siempre salí un poco retrasado, pero enseguida me coloqué en un grupito liderado por los corredores del Durango: Fontaneda, San Miguel y Ozaeta. Por suerte Asier Aguado y yo nos unimos a este tándem, en el que también se encontraba otro corredor peligroso como Unai Uriarte.


 
Así transcurrieron las dos primeras vueltas hasta que llegó la primera subida. Aguanté bien el tipo, y en la bajada pude ver como Asier imponía su calidad de corredor de montaña ya que al finalizar la bajada ya nos sacaba unos 10 metros al grupo. Nos reagrupamos poco después y yo ya veía que lo podía pasar muy mal en la siguiente bajada. Mientras Fontaneda perdía comba ya nos encontrábamos de lleno en la siguiente vuelta. Aquí ya me sacaron de punto en la subida y esta vez el que perdió unos metros fui yo. Me esforcé por volver a enlazar y lo pude conseguir, pero estaba perdiendo muchas fuerzas cada vez que lo intentaba.



Siguiente subida y ya casi no puedo subir corriendo. Inevitablemente veo como me van sacando unos metros. Si a esto le añadimos la bajada penosa que realicé la pérdida con el grupo era inminente. Intenté correr en la zona llana pero a pesar de mantenerme a la misma distancia me veía incapaz de recortar la distancia. Me limité pues, a mirar hacia atrás. Escuché a mi padre que me decía que el siguiente estaba a unos 50 metros. Factible, pensé. Y es que a pesar de todo no tenía malas piernas y decidí concentrarme de lleno en lo que hasta ahora sería mi carrera en solitario.



Escuchaba ánimos desde todos los puntos del circuito y eso me dio alas para poder mantener la diferencia con mis inmediatos perseguidores. En la última vuelta me relajé a pesar de que el atleta del Munarri, Jose Manuel Pastor se acercaba a toda velocidad. Quise disfrutar por una vez de una llegada tranquila en un cross.


Crucé la meta en 12ª posición a 3 minutos de Hassan y exactamente a 2 minutos de Aingeru. Con el primer atleta que lideró mi grupo perdí 38 segundos y fue el 8º clasificado. Con respecto al año pasado he mejorado 4 puestos, pero sigo siendo inconformista. Esta vez me falló un tema técnico, en el que poco puedo hacer porque ni es mi especialidad ni quiero que lo sea, pero no creo que lo fuera tampoco para todos los atletas que iban conmigo.
 
Como he comentado antes, quisimos ir a por el Campeonato por clubes, pero tuvimos que conformarnos con el segundo puesto, que no está nada mal y es que seguimos en la pelea.
 
 

La próxima cita será de nuevo en un Cross, en el Campeonato de Euskadi de Cross Corto que se celebrará en Azpeitia. Iremos con las mismas ganas y con la motivación de haber logrado un gran resultado en Berriz.

jueves, 1 de enero de 2015

San Silvestre de Sodupe

El día 31, además de celebrar el fin de año también se celebra la San Silvestre. Una bonita costumbre que llevo varias veces celebrando. La San Silvestre se celebra en muchos lugares, y lo difícil suele ser decidir cuál hacer. Pero desde hace ya 3 años cambié la carrera de mi ciudad por la de Sodupe. No sé por qué, pero desde la primera vez que la disputé me enganché a ella, el circuito, el ambiente, la hora (18:00)... Y es que correr de noche tiene un punto melancólico y emocionante.

A las 6 de la tarde y con un par de grados de temperatura se dio el "pistoletazo". Ya en la salida me di cuenta de que faltaba algún "gallo", y eso me daba confianza. Salí nervioso, pero no quise ponerme a tirar desde el principio. Fui dejando hacer a Pablo Mas mientras en la primera vuelta tanteaba a los demás rivales. Ya conocía a algunos y empecé a pensar que podía ser un buen día. 

Así que, tras algún otro intento de fuga en la que hasta 6 atletas nos metimos en cabeza, al paso por la segunda vuelta cambié el ritmo en una de las subidas. Joseba Plágaro se pegó a mí y al llegar a la segunda subida volví a cambiar para intentar soltarle. Tuve que emplearme a fondo, él corría en casa y estaba muy motivado pero yo tenía mucha rabia acumulada después de mi traspié en la media maratón de Vitoria. No pensaba en el flato ni en lo que pudiera ocurrir, simplemente pensé en correr todo lo rápido que me diera el cuerpo en ese momento.



Según avanzaba la carrera seguía escuchando los ánimos del público a Joseba, lo que indicaba que estaba cerca. No era el momento de aflojar y decidí administrar mi ventaja confiando en que no pudiera seguir ese ritmo. Por suerte así fue y a medida que recorría más metros fui pensando ya de verdad en que podía ganar la carrera. Pasé por el arco de meta, y ya sólo quedaba una vuelta.


Después de la cuesta larga me enfrenté en solitario a la penumbra que envolvía la carretera. Allí me esperaban los ánimos de los atletas más jóvenes de mi club y también triunfadores en la categoría de txikis. La moto de delante me abría camino y comencé a doblar a muchos atletas. Este fue un momento caótico, había mucha gente, más que en otras ediciones, y llegó a ser complicado poder hacerse hueco. Antes del último repecho ya pude respirar tranquilo. Miré hacia atrás y no veía a ningún perseguidor. Pensé en los años anteriores, por fin después de un segundo puesto hace 2 años y el cuarto del año pasado podía subir a lo más alto del podio. Me limité a disfrutar y saborear la victoria en estos últimos metros. Este año invertí un tiempo de 25:37, que es el peor crono de las tres ediciones que he disputado, condicionado posiblemente por la temperatura y hacer media carrera en solitario. El podio lo completaron Joseba Plágaro seguido de Pablo Martinez. En cuarta posición entró otro luchador como Iker Plágaro. Un lujo.




Otro lujo poder contar con Saioa en lo más alto del podio. Después de conseguir un 4º puesto en Rekalde pudo llegar a Sodupe a tiempo para lograr la victoria, resolviendo cualquier duda sobre su estado de forma. ¡Este es tu año y lo sabes!


¿Y vosotros, cómo comenzáis este 2015? Yo con la misma ilusión y las mismas ganas de correr que ayer, aunque hoy me haya dado un descanso. Merecido por otra parte. Ahora toca pensar en el único objetivo de enero, donde volveré al cross, en este caso al Campeonato de Bizakaia. ¡Nos vemos en las carreras!

Urte berri on!