miércoles, 28 de junio de 2017

Carrera San Juan

La pasada semana, aprovechando un periodo minivacacional, participamos en dos carreras. La primera fue una carrera muy especial, por hacerse por la noche y por ser en el centro de Vitoria. Esta carrera, la de San Juan, organizada por Martín Fiz, entró en los planes ya que nos encontrábamos en Haro y tampoco quedaba muy lejos.
Así que allí fuimos por la mañana a coger el dorsal y nos juntamos con Martín e Iban Rodriguez, unos clásicos en este tipo de carreras y que cuentan con un gran estado de forma y con los que nos íbamos a encontrar en la salida unas horas después.

La carrera, contaba con 5 km y se disputaba a las 21:30.


Ya de salida se impuso un fuerte ritmo marcado por un corredor que salió como un misil. Así pasaos el primer km en 3:07. Más tarde me puse a tirar yo para mantener un poco viva la carrera, y enseguida nos encontramos 5 atletas en cabeza con un bonito hueco. Entre ellos se encontraban Martín, Iban, Mikel López y Miguel Ángel Ruiz.



Iban e puso a tirar fuerte al paso por el parque, y a falta de 2 km ya éramos 4 para disputar el podio. Justo antes de pasar el puente y a menos de 1 km Miguel Ángel pierde comba y entramos Martín, Iban y yo en la última recta para disputar un apretado sprint.

No tenía todas conmigo a pesar de ser el más joven de los tres y no ser tan "lento" en este tipo de finales. Pero lo cierto es que me habían llevado a degüello y no sabía como iba a responder. 

Tomamos la curva de meta e Iban ataca con todo. Me cuesta responder y veo que la meta está todavía lejos. Aprieto y cuando me encuentro a su altura cambio con todo. Está claro que los entrenos en la pista no caen en saco roto. Me vi rápido y conseguí entrar primero.



Fue una noche mágica, donde Saioa también ganó en féminas y Bittor, que vino también a la carrera, consiguió un 12º puesto muy merecido.



lunes, 19 de junio de 2017

Oñatiko 10 Km

El sábado pasado tomé parte por segunda vez en los 10 km de Oñati, una prueba que hace unos años contaba con una participación de atletas internacionales de alto nivel. Ahora, la carrera cuenta con otro tipo de corredores: atletas vascos, de todos los rincones de Esukal Herria.

La carrera, programada a las 7 de la tarde, prometía ser de pura supervivencia. El calor quiso unirse a la fiesta a la que acudimos 19 atletas. Y otro calor, el del público, que siempre sale a las calles del pueblo a ver la carrera, nos empujaba desde el otro lado de las vallas. A pesar de los 33º, un escalofrío recorría nuestra piel al ser presentados uno a uno ante la gente. Y es que siempre es un placer acudir a esta cita, que cuenta con una organización volcada con cada uno de los corredores.

Y entre tanta élite me encontraba yo otra vez, con el cuerpo pidiéndome un respiro y la cabeza insistiendo en echar el último aliento. Un último esfuerzo de 10 km repartidos en 7 vueltas y media.

Y por fin se dio la salida, lenta, pesada, ya que el sol caía con aplomo sobre nuestras cabezas. Primer parcial en 3:22, muy lejos del ritmo que se dio de salida hace dos años. Iba a costar, y tras varios marcajes entre los más fuertes, donde aguanté con muchas dificultades en las primeras vueltas, decidí perder unos metros en busca de un ritmo más adecuado a mis nuevas características de atleta cansado.



Me uní a Lukin, Ekaitz Kortazar e Iñigo Olano allá por el km 4, donde parecía que las cosas iban a ir mejor. Pero me costaba seguir "a rueda", y tenía la sensación de que me iba a costar lo mismo a cualquier ritmo. Una vuelta después Lukin se dejó caer y los tres nos quedamos luchando contra la adversidad.



A falta de vuelta y media mi cuerpo dejó de hacer caso a mi mente y se separó del grupo. Perseguí, no sin dificultades, la estela de los atletas que me habían acompañado durante medio viaje. El tiempo no iba a ser bueno, iba a distar mucho de ser decente, y es que así era imposible correr.



Llegué 10º, arrastrando los pies sobre el asfalto ardiente y con un crono de 33:56, a casi minuto y medio del ganador de la prueba y de mi anterior marca en este recorrido hace dos años.



En la clasificación se puede observar el nivel participativo y la dureza de la carrera, donde los tiempos quedaron lejos del nivel real de cada uno. 

Y es que esta prueba es tan dura como bonita. Cuenta con muchos de los mejores atletas de Euskadi, y así queda demostrado. Un placer compartir unos metros con ellos, y con todo el público que se vuelca en la carrera. Una organización de 10, a la que doy gracias por querer contar conmigo. Eskerrik asko Asier eta guztioi benetan!

Y no me quiero olvidar de aquellos que me acompañan en estas aventuras: Saio, Bittor, Aita eta Ama.


lunes, 5 de junio de 2017

Carrera Popular por la Esclerosis Múltiple

Este pasado fin de semana nos tocó viajar a Oviedo para tomar parte en el Metal Roots Fest, un festival en el que participamos 5 bandas. Como siempre en estos caso, la cosa se suele alargar y desmadrar un poco...





Resulta que para intentar no entrenar el domingo a la tarde y estar más reventado que a la mañana, se me ocurrió apuntarme a una carrera que se celebraba en la propia ciudad al día siguiente. Y precisamente era la primera edición, así que fue una buena casualidad.

Así que tras dormir 3 horitas más o menos y desayunar un poco en el hotel, Juaro (batería) y Leire (cantante) me acompañaron a la carrera. ¡Aupa ahí!




No tenía referencias de nadie, ni del recorrido tampoco, sabía que eran unos 6,5 km, pero nada más. Y como mi cuerpo aún estaba asimilando la noche anterior me daba un poco igual, así que decidí salir a lo que fuera, sin presión.


Y salimos lentos, así que a gusto. Poco a poco fui entrando en calor y entorno al km 3 Ciro Cansado, a la postre vencedor de la carrera, y yo abrimos un pequeño hueco que aguantamos hasta el final. La carrera era un continuo sube-baja, así que no fue una agradable sorpresa para mí. No obstante, mantuve el tipo detrás de Ciro. En agradable armonía, sin cambios de ritmo, e incluso relevando nos plantamos en el último km con las opciones a la victoria intactas.

Yo pensaba que estaba bien para disputar un sprint, la verdad es que a pesar de la trasnochada me sentía con fuerzas y solo estaba esperando un acelerón de Ciro para poder responder. Pero en el momento de cambiar el ritmo me sentí vacío. Aaaaaamigo, ahí está el tema... Cansado, más bien reventado, eso sí que no he sentido en toda la temporada.




Por contra, me sentí algo mejor que otras veces en general. Aunque sé que estoy lejos de mi mejor versión, y es que estar como el año pasado la verdad es que era algo muy complicado, y no tiene pinta de que la cosa vaya a cambiar a corto plazo.

En el tercer cajón nos acompañó Pablo Camino, que superó en un apretado sprint también a Pablo Barbosa.

Desde aquí me gustaría nombrar a la gran organización de la carrera. Me dieron el premio al segundo clasificado antes del protocolo de la entrega de trofeos porque teníamos que marchar a Bilbao. Un placer conocer gente tan agradable por Asturias, sin duda es una tierra que nos encanta. ¡Volveremos, seguro!